lunes, marzo 16, 2009

Cumbio salió en el New York Times y vos que no entendías por qué afuera nos tienen de boludos

...
Si pensabas que en EEUU apenas nos ubicaban por Ginóbili. Si pensabas que la Argentina, como tantos otros países, no figuraba en la mente de ningún norteamericano. Si pensabas que el trabajo duro o el estudio únicamente te llevan al éxito. En definitiva, si pensabas. No pienses más... Porque lo hacés para el orto.

Estrella es la palabra con la que EL diario yanqui define a esa mocosa que a tantos inútiles llena de lágrimas, amor, devoción e idolatría... Y a otros tantos de odio, rencor e impotencia.
Decadente es la palabra que define a un país en el que una piba que no sabe hacer nada más que teñirse un mechón y sacarse fotos sea considerada "famosa".


¡Ey, vos! Que sos un adolescente argentino de entre 13 y 19 años. Si tu mayor sueño es ser famoso, si siempre quisiste ser una estrella y que todos te amen o te odien (pero que cada ser humano conozca tu nombre) ¡hoy te damos la fórmula del éxito!
No importa lo que hagas, simplemente hacete parte de una tribu, vestite como otros, peinate como ellos y hagan todos lo mismo. Eventualmente alguno va a ser diferente porque esa es la naturaleza humana, aunque vos tengas una tendencia subconsciente hacia el comunismo.

Si tenés un mínimo de iniciativa y algo de personalidad (no demasiada porque si no serías independiente y no un boludo más), puede que esa persona diferente seas vos. Si lo sos, primero vas a sobresalir un poco, pero eventualmente van a convertirte en un ícono de su estilo. ¡Y quizás hasta te adoren!
Una vez que esto suceda, no va a pasar mucho tiempo hasta que algún buitre te descubra y encuentre en vos un negocio copadísimo. Y cuando el buitre te lleve a algún programa, tu fama va a crecer y cada ave de rapiña del medio va a estar desesperada por hablar de vos, porque tenés cara de billete.

Y así comienza tu prestigioso recorrido por cada uno de los mejores canales y programas de nuestra retrógrada programación. Si algún programa no te invita, ¡no te preocupes! Seguro es uno de esos que hacen cosas inteligentes y vos no querés estar ahí. Porque lo que vende en masa y te da fama es la pelotudez total. Cuanto más idiota el programa, más porotos sumás en la escalera a la gloria.

En este punto te sentís el rey del mundo. ¿Pero vos que sabés de la vida? Si apenas tenés 17 o 18 añitos, ¡no entendés nada! Pero vas a pensar que sí y vas a hablar de todos esos temas "picantes" que asustan a la abuela, solo para generar bardo entre la gente conservadora y que todos hablen de tus polémicos comentarios que, en realidad, los medios se pasan por el culo, pero es lo que vende.
Tu fama aumenta y se hincha como un castillo inflable y nuevos productos con tu cara salen al mercado. Al principio apuntando a esa tribu que te vio nacer, pero luego, extendiéndose a todo el público que puedan abarcar.

Y vos no podés ser más feliz, salvo por esa gente que te odia y habla mal de vos. Pero vos no entendés nada, porque sos un nene, y no te das cuenta que el odio también suma. Pero los que te odian y persiguen entienden menos y son todavía más idiotas que vos. Porque en este punto, sos casi indestructible. Tu única debilidad sería que te ignorasen y pases de moda. Pero nadie se aviva, salvo los que se llenan los bolsillos con tus fotos.

Y después podés escribir un libro, actuar en una obra, aún que no sepas actuar, y hacer todas esas cosas para las que no servís. Que las podrías aprender a hacer, pero no te da el tiempo entre tanta foto, posteo, Abasto y boliche. Y cuando te querés dar cuenta, llegaste al New York Times ¡y vos no tuviste nada que ver, porque no hiciste nada! Porque no hacés nada. Esa es tu gracia, tu encanto. ¿Quién puede odiarte o tenerte bronca? ¡Que pérdida de tiempo! Si no sos diferente a nadie ni tenés nada de especial y vos mismo lo sabés y aceptás... Un día estabas paseando por la paya con tus lentes de sol fucsias y te llevó puesto una ola. Y cuando quisiste darte cuenta mirá hasta donde habías llegado.

Y quién sabe a donde más llegues, porque cuando se trata de pelotudez al extremo, de gente que mira lo que hay cuando prende el televisor y apaga el cerebro, de enemigos que alimentan tu ego con su odio, de noticieros que te halagan en público aunque te odien en secreto, de programas que te entrevistan aunque te envidien con todas sus fuerzas y de medios que hacen negocio de cosas tan efímeras, Argentina es el país más grande de todos...

País bananero dicen... La banana nos queda re grande.


http://www.clarin.com/diario/2009/03/14/um/m-01877190
_ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _